¿Conoces el síndrome del pez dorado? Te lo cuento, el pez dorado es un animal que tiene 9 segundos de memoria, entonces todo lo que ve después de ese tiempo es nuevo, 9 segundo para olvidar en donde está y para dónde va, y seguir girando en círculos, si le das demasiada comida, comerá y comerá a riesgo de enfermarse, de esta forma lo resumiría para nuestro lector.
Ahora, nuestra realidad financiera no es muy diferente, perdemos el interés por el pasado y al mismo tiempo el control sobre nuestro futuro, no tenemos en cuenta nuestros errores financieros y creemos que seguir manejando el dinero como lo hemos hecho hasta ahora nos dará resultados diferentes ¿Eres de aquellos que gastan mientras tengan dinero en el bolsillo o, peor aún, mientras alguien esté de acuerdo con prestarles? Déjame decirte que sufres del síndrome del pez dorado
Así que ¡en hora buena has empezado a leer este artículo!
Es necesario comenzar a trabajar el autocontrol, ser conscientes de nuestra relación con el dinero y preguntarnos ¿cómo hemos llevado nuestras finanzas hasta ahora? De lo contrario solo tendríamos que hacer como los peces dorados, trabajando incansablemente sin poder lograr nuestros objetivos, dando vueltas en el mismo lugar y gastando en todo cuanto se nos atraviese, en este punto nuestras decisiones financieras llegarían a hacernos daño en lugar de ayudarnos.
Déjame compartirte dos consejos prácticos que te ayudarán a superar este síndrome y empezar a tener el control de tus finanzas:
- Reduce las compras impulsivas, ¿cómo reaccionas frente al deseo que sientes cuando te encuentras ante una decisión de compra que te emociona? Cuando estés frente al estante de esa chaqueta o esos zapatos que te cautivaron no la compres de inmediato, vuelve al día siguiente y mira si realmente vale la pena, o si lo necesitas, esto disminuirá la adrenalina que te produce y te permitirá pensar si necesitas adquirir ese producto.
- Antes de tomar una decisión de compra que no haga parte de tus gastos obligatorios, puedes preguntarte cuántas horas trabajaste para pagar ese gusto, Esto te ayudará a saber si realmente lo que quieres comprar vale tu tiempo de vida, o si no es necesario.
Si sigues estos consejos, te ayudarán a llevar una relación con el dinero más saludable, podrás disfrutar de tu tiempo y del dinero que ganas sin remordimientos y seguramente serás libre del síndrome del pez dorado.
Si te gustó este artículo seguramente te encantarán todas nuestras ideas personales para bolsillos reales, contáctame y empecemos a trabajar en tus finanzas